Que un buen día,
en la intolerancia frunza el seño el rey de los impertinentes
abriendo un paso diferente a una tal paloma de la paz.
***
Así mi tolerancia.
Cuando asiento mis manos que vibran
cuando mitigo el grito
cuando vislumbro el abrazo último
y poder sostenerme al limite,
para amarte en el reflejo
de lo que también soy.
Rebe
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario